Donde la literatura y la maldad se toman un té

sábado, 17 de mayo de 2014

La Huésped, de Stephanie Meyer

Título: La Huésped
Autora: Stephanie Meyer
«Melanie Stryder se niega a desaparecer. La tierra ha sido invadida por criaturas que han tomado el control de las mentes de los humanos en los que se hospedan, dejando los cuerpos intactos, y la mayor parte de la humanidad ha sucumbido. Wanderer, el «alma» invasora que habita el cuerpo de Melanie, se enfrenta al reto de vivir dentro de un humano: las emociones abrumadoras, los recuerdos demasiado intensos, pero hay una sola dificultad que Wanderer no consigue vencer: la anterior propietaria de su cuerpo lucha por retener la posesión de su mente. Melanie inunda la mente de Wanderer con visiones del hombre que ama, Jared, un humano que vive oculto, hasta el punto de que, incapaz de controlar los deseos de su cuerpo, anhela a un hombre al que jamás ha visto. Una serie de circunstancias externas las convierte en aliadas muy a su pesar y parten en busca del hombre que ambas aman a la vez. The Host nos muestra el primer triángulo amoroso que implica a sólo dos cuerpos, en una inolvidable y fascinante novela que atraerá a un gran número de lectores de una de las más cautivadores escritoras de nuestro tiempo.»

Bueno, tú te lees semejante sinopsis… y ya te preparas para lo peor. Sin embargo, creo que fue un fallo por mi parte haber comenzado este libro con tan altas expectativas: sin duda debería haber tenido en cuenta que Crepúsculo era una saga muy difícil de superar. Finalmente ha resultado que, de los cinco libros que ha escrito esta señora hasta ahora, probablemente este es el menos ofensivo (aunque admitiré que me preocupa el que esté considerado una «novela para adultos». ¿Qué clase de adultos tenemos hoy en día, madre del amor hermoso…?).

De la trama creo que no hay mucho más que decir aparte de lo ya mencionado en la sinopsis: futuro post-apocalíptico en el que la raza humana ha sido diezmada hasta casi la extinción, cortesía de unos simpáticos y tentaculosos seres llegados del espacio exterior. Por supuestísimo, tenemos una protagonista de carácter indomable y… una historia de amor paleta (sí, otra). Antes las distopías se centraban en describirte la realidad futura espantosa, a modo de crítica de la sociedad presente. Ahora la situación es sólo la excusa para justificar la fantasía paleta de turno, porque, seamos sinceros, ¿a quién le importa la humanidad y sus penurias? ¡A mí dadme morbo!

En cuanto al núcleo, vale. Aquí le daré un mini-punto a nuestra querida Meyer, porque está relativamente bien colocado (típico, pero al menos existe, que ya es más de lo que pueden decir muchos). El argumento es la búsqueda del «hogar», un lugar al que pertenecer, y en ese sentido tanto el personaje como la ambientación están bastante bien escogidos, porque tenemos a un bicho extraterrestre que ha vagabundeado durante milenios por el vasto universo, de planeta en planeta, sin encontrar un sitio al que se sintiese ligada, hasta que llega a la Tierra (en una situación muy poco propicia, con los rebeldes y demás, lo cual ayuda a esa sensación de desarraigo) y todo empieza a complicarse. Ok, se lo compro.

Por otro lado, en lo que a la autoridad de la voz narrativa se refiere, esta historia le viene grande a nuestra consagrada escritora de masas. Personalmente me eché unas cuantas risas con la primera escena y su maestral dominio de los conocimientos médicos y anatómicos necesarios para implantarle un bicho en el cuello a un humano. Epic, de verdad. Epic fail.



La voz de Wanderer, que narra en primera persona, no es ni remotamente creíble: ¿cuántos miles de años habíamos dicho que tenía? Porque más da la sensación de ser una niñata cualquiera, y es corta que te cagas, ¡no se entera de nada! No entiendo cómo ha podido sobrevivir durante tanto tiempo, para empezar; por fuerza en algún planeta algún otro bicho debería habérsela comido, aprovechando uno de sus momentos de brillantez supina, y haberle hecho así un favor a la evolución sacando sus genes de la piscina genética.

La relación entre el objetivo consciente y el objetivo subconsciente del personaje también es bastante pasable (volvemos a lo de siempre: ¡tiene objetivos, en plural! Eso ya es un logro): quiero encontrar a mi hombre, aunque no quiero ser una traidora, versus quiero pertenecer a alguna parte y que me quieran. Y el cambio es también muy bien apreciable, pero sin resultar tan accidentado como me tienen acostumbrada este tipo de libros: la muchacha pasa de vivir en su mundo cómodo con su ideología cómoda y sin fallas a verse arrojada básicamente a un pozo de inmundicia en el que prima la ley de la selva (tal y como ella lo ve al principio), y poco a poco es capaz de ir sacándole más sentido a la situación, hasta que está con la mierda hasta el cuello, como quien dice.

Del resto de personajes: los dos mozalbetes de turno no tienen ni el más mínimo interés narrativo, están puestos simplemente para poder tirar de paletada; el hermano es adorable, lo admito, pero no se comporta precisamente acorde con la edad (y la madurez mental de sociedad en guerra post-apocalíptica) que se supone que tiene, eso dejando aparte que es bastante plano; el tío es el prototipo de genio loco, como no podía ser de otra manera, dadas las circunstancias; tenemos también al antagonista humano, del que no sabemos nada salvo que es muy malo e intransigente y quiere matarnos; y la antagonista extraterrestre, que más o menos viene a ser tres tantos de lo mismo, hasta que empezamos a llegar al final; y ¡no podemos dejarnos a Melanie!, la pobre niña atrapada dentro de su propia mente y a merced del control del parásito: nada que decir de ella, la verdad, es un personaje de lo más anodino, me aburre.

La prosa: texto absolutamente plano, párrafos kilométricos y explicativos, la traducción es un tanto pobre (aunque tampoco culpo al traductor: dudo que el original tuviera una gran riqueza que perder). Teniendo en cuenta que Meyer no se molesta en contarte nada de la situación del mundo en general tras la invasión alienígena, al libro le sobran bastante más de la mitad de las páginas, tira muchísimo de dramatismo por completo innecesario para la trama (o para el argumento, para el caso). Huelga decir que la selección de elementos brilla por su ausencia y que no hay justificación ninguna para la mitad de los comportamientos de los personajes. Hay una abrumadora cantidad de resumen narrativo, por lo que la lectura se hace bastante lenta, salvo en los puntos de tensión dramática (que no necesariamente narrativa). No cuenta básicamente nada la mayor parte del tiempo, se conforma con darte toda la información que necesitas saber bien clara y explicadita, y la única reflexión que hace (la destructividad de la raza humana) está ya tan vista que, francamente, no hacía falta que nos la contara otra vez.

Y ya en otro orden de cosas… ahora viene la parte en la que me río de la historia descaradamente (¡atención spoilers!):

Pues sí, ¿y pa' qué?
-Me fascina absolutamente el conocimiento anatómico de Meyer y la precisión cirujana con la que se expresa: describiendo cómo el alienígena se mete en el cuerpo de la chica, «Algunas de sus adherencias se enroscaron con fuerza en el sitio correcto, alrededor de los centros nerviosos, mientras que otras se estiraban y profundizaban hasta donde ya no podía verlas, por debajo y hacia el interior del cerebro, donde se encuentran los nervios ópticos y los canales auditivos». Dando por perdido el baile de tiempos verbales, esto me recuerda a una película que vi de niña, en la que los malos utilizaban unas orugas que se te metían por las orejas y te controlaban el cerebro. Con dos cojones.

-También tiene paridas fanfic de la talla de «encogió los ojos». Yo quiero aprender a hacer eso, tiene pinta de ser jodido.

-Y qué me decís de la conversación de «somos el último hombre y la última mujer del planeta». Di-os. Esta es definitivamente una de esas conversaciones que nunca, jamás, deberían tener lugar. Cuantísima vergüenza ajena he tenido que pasar con esto. Mierda.

-La historia cuenta con fallos de base bestiales, provocados a partes iguales por una falta de construcción del mundo en el que se mueven los personajes y una carencia obesa de sentido común. Así, los protagonistas hacen cosas como poner un criotanque más entre el cargamento de cientos destinados a salir del planeta, sin que tengan que preocuparse lo más mínimo de que alguien se dé cuenta. ¿Para qué demonios iba a llevar alguien un registro de cuántas «almas» están enviando por correo intergaláctico a cada planeta? Y de ponerles algún tipo de etiquetita identificativa al cacharro ni hablemos, vaya. Total, una más, una menos, a quién le importa. Son todas iguales, si una se pierde tampoco pasa nada.

-El final es tan épico como el final de la saga Crepúsculo. Epic fail. Hubiera sido tan fácil hacer algo decente (no digo tampoco fantástico: uno no puede salvar una historia tan mala sólo por un buen final), pero cuando nuestra autora vio la oportunidad de hacer algo bien, hizo como el capitán Sparrow (aunque con menos estilo) y se limitó a saludar con la mano mientras la veía pasar de largo.

-Mi parte favorita de la historia, sin embargo, y la que se lleva la palma, es el lugar de honor que se le adjudica a los Cheetos. Sí, sí, no me lo estoy inventando: en este futuro distópico, los Cheetos son una delicatesen, la octava maravilla, un manjar sin parangón, llenos de propiedades deseables y beneficiosas para la salud. Todo el mundo los codicia, matarían por ellos. ¿Que un personaje quiere hacer que otro se muera de envidia? Cheetos. ¿Qué alguien está enfermo? Cheetos. Chúpate esa, Adriá Ferrán.

Chichómetro: regurgitado. No, gracias.

Potabilidad: sí, se puede potar.

Carcajadas: 6/10

Otras páginas que tienen publicadas críticas o reseñas de este libro, por si os interesa contrastar: Cajón de girasoles, El caminante de libros, My little box of books.

12 comentarios :

  1. Vi la película porque ni de coña me iba a leer el libraco ese y más siendo de Lady Meyer. La verdad es que para el truño que me esperaba me gustó, a la protagonista me entraron ganas de darle un par de collejas de vez en cuando, pero bueno, tuvo sus momentos agradables y las lentillas a lo iceman molaban un montón.

    Besos!

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  2. ¡Wow! ¡Pedazo reseña! Me gustado mucho, está muy pero que muy elaborada y no te has dejado nada de nada, es más, me parece que la mía queda un poco obsoleta xDDDDDDD Me gusta mucho tu escritura y tu manera de hacer reseñas, ¡es genial! Sigue así :)
    Mil gracias por hacer publicidad de mi blog <3

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  3. Ekaitz.

    He ahí un nombre que mola.

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  4. Yo me leí primero el libro y luego vi la peli, como no esperaba mucho de ninguno de los dos al final resulto que me gustaron. Que si, como dices no son obras cumbres, pero me entretuvieron que es mas de lo que se puede pedir en los tiempos que corren. Genial la reseña, me he reído un montón, jajaja

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  5. La película era entretenida, pero comparándola con el libro, era una porquería: se cargaba completamente el mensaje de la novela, que era lo mejor que tenía que ofrecer.

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  6. Hola, te nominé a los Liebster Awards en mi blog te dejo el link http://mywordschangingtheworld.blogspot.com.ar/2014/05/premio-1-liebster-award-ludmi-y-male.html

    Beso!

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  7. ¡ARGH, NOOOOO! ¡Más Libester Awards! D: ¿Es que no se acaban nunca?

    En fin. Ortiga, tengo una proposición indecente para ti.

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  8. Hola :D
    Hace tiempo que quiero leerlo, pero acabé tan saturada de la autora tras leer la saga Crepúsculo que lo he ido dejando pasar...
    Te sigo, besitos ^^

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  9. Antes que nada diré que este comentario incomprensiblemente largo que dudo que alguien lea no pretende ofender a nadie... lo digo porque ahora que le doy una leída parece que me estoy quejando a lo fan obsesiva de 50 sombras de Grey y pues sólo quiero aclarar que mi única intención es saber QUE BUSCAN EN UN LIBRO por pura curiosidad y con fines informativos... esto no es ni una queja ni una crítica ni nada por el estilo pero mis comentarios siempre salen así... sólo quería que quedara claro
    He tenido ganas de hacer esta pregunta desde hace un montón de tiempo... ¿Que es lo que buscan ustedes en un libro? llevo poco mas de un año leyendo este blog a pesar de que es justo lo opuesto a mi... la crítica no es que no me guste, es que no la aguanto, simple y sencillo, no la tolero, punto, pero en fin he visto que aquí se reseñan libros de todas las temáticas y sigo sin entender que es lo que buscan en las llamadas "obras cumbre"
    La verdad que por mas que intento no doy con el clavo, leo y leo sus reseñas pero no hallo que es lo que les gusta... lo que les disgusta si claro pues me da impresión de que es lo único de lo que hablan en sus reseñas o al menos es lo que me da a entender pero lo que no me queda claro y no entiendo es lo que quieren encontrar en un libro...
    Para mi la verdad es que Oscar Wilde y Stephenie Meyer son la misma cosa, no tengo a ninguno en un pedestal si me gusta me gusta y si no pues no, a otro le gustara pero eso de "bueno" "malo" "obra maestra" "obra basura" eso como que no pega con migo son palabras que saque de mi vocabulario y sólo las uso en estos casos... para decir que no las uso XD
    Por cierto lamento haber borrado mi anterior comentario es que mi teclado esta como despintado y después de publicarlo me di cuenta de que me había comido una palabra al mas puro estilo de la primaria así que pues lo borre para editarlo.

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  10. Marceliitha Kuran, en este blog buscamos calidad literaria, se dé esta en el género/temática que sea. Nada más y nada menos: que haya una intención comunicativa (núcleo) y esté bien trabajada, que la trama sea original y coherente, que los personajes tengan profundidad narrativa y estén adecuadamente construidos y presentados, que haya una autoridad narrativa decente, que el texto esté bien redactado, que haya una adecuada selección de elementos, escenas y vocabulario, etc.

    Aquí no hablamos de gustos. A mí me encanta la literatura juvenil, me entretiene mucho y la disfruto, y aún así la pongo a caldo todo lo que haga falta, ya lo habrás visto.

    Espero que mi comentario te aclare un poco las cosas.


    Con amorr,

    O.

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  11. No me deja responder... :$
    Visto así... la verdad me doy cuenta que no tengo ni la menor idea de calidad literaria XD todos esos items que has mencinado la verdad esque me siento incapaz de detectarlos o no en un libro.
    Gracias Ortiga eso era lo que queria tener claro leía y leía las reseñas pero no terminaba de entender.

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  12. Yo escribo mis propias historias y cada vez que leo una de vuestras reseñas corro a revisarlas y pienso "¿Que diría Ortiga de esto?" Y realmente creo que así detecto mis pequeños, o enormes, fallos que tiran alegremente por la borda mis textos. Gracias por todo :D

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